PALIO Y CERA Nº6

ORACIÓN DEL SANTO PADRE JUAN PABLO II PARA LA CELEBRACIÓN
DEL GRAN JUBILEO DE AÑO 2000.

JÚBILO.

AÑO DE LA ENCARNACIÓN.

JUBILEO DE LA ENCARNACIÓN.

POESIA - EN HONOR A LA VIRGEN -.






























Volver a la página anterior


ORACIÓN DEL SANTO PADRE JUAN PABLO II PARA LA CELEBRACIÓN
DEL GRAN JUBILEO DE AÑO 2000.

1.- Bendito seas, Padre, que en tu infinito amor nos has dado a tu Hijo unigénito, hecho carne por obra del Espíritu Santo en el seno purísimo de la Virgen María y nacido en Belén hace dos mil años.

Él se hizo nuestro compañero de viaje y dio nuevo significado a la historia, que es un camino recorrido juntos en las penas y los sufrimientos, en la fidelidad y el amor, hacia los cielos nuevos y la tierra nueva en los cuales, Tú, vencida la muerte, serás todo en todos.

¡Gloria y alabanza a ti, Santísima Trinidad, único y eterno Dios!

2.- Que por tu gracia, Padre, el Año jubilar sea un tiempo de conversión profunda y de gozoso retorno a tí; que sea un tiempo de reconciliación entre los hombres y de nueva concordia entre las naciones; un tiempo en que las espadas se cambien por arados y al ruido de las armas le sigan los cantos de la paz.

Concédenos Padre, poder vivir el Año jubilar dóciles a la voz del Espíritu, fieles en el seguimiento de Cristo, asiduos en la escucha de la Palabra y en él acércanos a las fuentes de la gracia.

¡Gloria y alabanza a ti, Santísima Trinidad, único y eterno Dios!

3.- Sostén, Padre, con la fuerza del Espíritu, los esfuerzos de la Iglesia en la nueva evangelización y guía nuestros pasos por los caminos del mundo, para anunciar a Cristo con la propia vida orientando nuestra peregrinación terrena hacia la Ciudad de la luz.

Que los discípulos de Jesús brillen por su amor hacia los pobres y oprimidos; que sean solidarios con los necesitados y generosos en las obras de misericordia; que sean indulgentes con los hermanos para alcanzar de ti ellos mismos indulgencia y perdón.

¡Gloria y alabanza a ti, Santísima Trinidad, único y eterno Dios!

4.- Concede, Padre, que los discípulos de tu hijo, purificada la memoria y reconocidas las propias culpas, sean una sola cosa para que el mundo crea.

Se extienda el diálogo entre los seguidores de las grandes religiones y todos los hombres descubran la alegría de ser hijos tuyos.

A la voz suplicante de María, Madre de todos los hombres, se unan las voces orantes de los apóstoles y de los mártires cristianos, de los justos de todos los pueblos y de todos los tiempos, para que el Año Santo sea para cada uno y para la Iglesia causa de renovada esperanza y de gozo en el Espíritu.

¡Gloria y alabanza a ti, Santísima Trinidad, único y eterno Dios!

5.- A ti, Padre omnipotente, origen del cosmos y del hombre, por Cristo, el que vive, Señor del tiempo y de la historia, en el Espíritu que santifica el universo, alabanza, honor y gloria ahora y por los siglos de los siglos. Amén.


JOANNES PAULUS II

Volver al inicio de la página


JÚBILO.

Júbilo es viva alegría. Pero viva alegría, especialmente manifestada con signos externos, como la que nos ha inundado a los californios y hemos demostrado a nuestra manera a la entrada de Tercer Milenio.

Y es, que no es para menos, al celebra y conmemorar como Iglesia, la Encarnación de Dios.

Ello constituye el primer paso de una serie de actos que nos proponemos realizar durante todo el año, preparados concienzudamente. Primero con el aniversario de los doscientos cincuenta años del titular de la Cofradía de Nuestro Padre Jesús en el Doloroso Paso del Prendimiento; y luego, con la coronación canónica de la Madre de la Hermandad María Santísima del Primer Dolor.

Dos hechos inmarcesibles que quedarán marcados indeleblemente en la historia california y en la de Cartagena, por su hondo contenido religioso y social. Dos actos para los que ha tenido que transcurrir un cuarto de milenio, pero que nuestra generación también ha tenido la dicha de preparar, vivir y gozar.

Gozo y alborozo, regocijo y júbilo, alegría en suma, en torno a la conmemoración de la humanización de Nuestro Padre Jesús a través de la Virgen del Primer Dolor mediante el Espíritu Santo.

Las dos imágenes, Jesús y María, trascienden al arte puesto al servicio de la devoción, van más allá de la composición del pathos o emoción perseguida. Y aunque, en ambas, hay más de divino que de humano, los californios en el fondo de nuestro corazón, las hemos considerado mortales.

Que alegría se nota ahora en la Cofradía con este jubileo del Año Dos Mil, a través de todas y cada una de las Agrupaciones que se preparan para ganarlo.

Y sobre todo desde la de la Santísima Virgen del Rosario a quien la Hermandad ha encargado la organización de la peregrinación al templo de la Caridad, facultado por nuestro Obispo para ello.

Muchas gracias por vuestras sugerencias y ayuda, pues con ellas habéis hecho, una vez más, Cofradía; y vuestro éxito es el éxito de todos y, juntos todos gozaremos del gran jubileo de la Encarnación del Señor.

CARLOS FERRANDIZ ARAUJO
Hermano Mayor.

Volver al inicio de la página


AÑO DE LA ENCARNACIÓN.

Estamos otro año más inmersos en la cuaresma y ya se ven a los hermanos de las distintas agrupaciones acelerando los preparativos para que este año sea mejor que el anterior.

Aunque este es un año muy distinto, los cristianos tenemos que estar contentos, pues estamos celebrando el año jubilar, año de la Encarnación, y os animo a participar activamente en todos los actos que celebra la iglesia diocesana así como los que podamos celebrar en nuestra Agrupación con este motivo.

Pero en este año como en anteriores es un motivo de tristeza la pérdida de personas más o menos cercanas que no podrán disfrutar de aquello por lo que tanto lucharon.

Quisiera que quedara constancia escrita en nuestra revista el reconocimiento a dos grandes californios que tuvieron una vinculación directa con nuestra Agrupación y que toda su vida la dedicaron a engrandecer nuestra cofradía y nuestras procesiones:

Manuel Latorre Presidente de la Agrupación del Osculo, que, durante su presidencia, Cartagena pudo disfrutar en sus procesiones entre otros logros, del primer grupo de portapasos juvenil y del primer grupo de portapasos femenino y de José Antonio Ros penitente mayor de la Agrupación de la Flagelación, que forró de madera la sala capitular de nuestra cofradía y realizó la burra y el pollino para la Entrada de Jesús en Jerusalén de la procesión del Domingo de Ramos.

Dos personas a las que he admirado, Manolo como californio y José Antonio como californio y persona muy querida por mí, ya que tuve la gran suerte de tenerlo como tío político.

Espero que su ejemplo nos sirva a todos los miembros de la Agrupación de María Santísima del Rosario así como a los hermanos de la cofradía california a continuar trabajando para engrandecer nuestra cofradía.

FRANCISCO LEAL QUINTÁN
Mayordomo Presidente de la Agrupación.

Volver al inicio de la página


JUBILEO DE LA ENCARNACIÓN.

Nos encontramos inmersos en plena cuaresma del Año Santo Jubilar 2.000. En este año, para el cual la Iglesia se ha ido preparando dedicando los tres años anteriores a Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, los cofrades californios debemos tener muy presente la figura de María.

Ya en el año 1.997, los cofrades del Prendimiento iniciamos nuestro camino hacia el Jubileo 2.000. En la ponencia que nuestro Hermano Mayor, Ilmo. D. Carlos Ferrándiz Araujo, presentó en el Congreso Getsemaní'97, de Hermandades de Oración en el Huerto de toda España, celebrado en Cartagena, se dieron las primeras ideas y actuaciones para concienciar a todos los cofrades de la importancia de este año para la vida de nosotros, cristianos de final de siglo, ante el reto del Tercer Milenio y la Nueva Evangelización.

Hemos comenzado el año con un acontecimiento que hace historia en nuestra Hermandad, me refiero a la Coronación Canónica de Nuestra Madre del Primer Dolor.

Nos decía nuestro Obispo de Cartagena, Monseñor Ureña, la gran alegría que sentía al ver que los cofrades californios habíamos elegido precisamente el Año Santo 2.000, Jubileo de la Encarnación, para coronar la imagen de María. Todos los cofrades nos concentramos rodeando a la Madre en ese día tan especial, demostrando nuestro amor hacia Ella.

El pasado sábado 4 de Marzo, la Cofradía California estuvo presente en la ciudad de Murcia, con su estandarte a la cabeza, para asistir a un encuentro de cofradías y procesionar desde la Iglesia de San Lorenzo a la Santa Iglesia Catedral de Cartagena, ganando el Jubileo. Los hermanos de la Agrupación de María Santísima del Rosario llevaron el peso de la organización de este desplazamiento, demostrando, una vez más su profundo sentido cofrade, trabajando por su Cofradía California.

Quiero felicitaros, hermanos del Rosario, por vuestra permanente disposición hacia vuestra cofradía. Habéis entendido, como nadie, que la cofradía es algo más que un conjunto de agrupaciones. Somos una gran familia donde debemos apoyarnos los unos a los otros, especialmente en, momentos difíciles que siempre surgen en la vida de toda familia. Ojalá cunda el ejemplo.

Pero esto no queda aquí. La Cofradía California quiere organizar una peregrinación que, partiendo de nuestra capilla, se dirija a la Consagrada Iglesia Rectoral de la Caridad, donde de igual modo se puede ganar el Jubileo. Dado su probado amor a la Cofradía, la Agrupación de María Santísima del Rosario será la que organice la peregrinación, estando en estudio incluso la posibilidad de que la imagen de la Virgen, figura destacada de este Año Santo, sea trasladada a la Caridad con el resto de la Hermandad. Esto sin duda supondrá una gran alegría para vosotros hermanos del Rosario y para todos los que nos sentimos Californios. Ganar el Jubileo como Hermandad, todos juntos a los pies de Nuestra Madre de la Caridad, es un acontecimiento único y, no dudo, será preparado minuciosamente por todos.

Cuando estamos a escasos días de ver por las calles de Cartagena la preciosa imagen de la Virgen del Rosario, y los preparativos se disparan, a la vez que los nervios, debemos ser conscientes de estar en un año especial. Hace dos mil años, la Virgen niña de Nazaret nos dio al mundo el mejor regalo que jamás nadie pudiera hacer. Nos dio a su Hijo, que habría de soportar sobre sus hombros el pecado del mundo, siendo Prendido en el Huerto de Getsemaní para que, todos nosotros, sus hijos, pudiéramos ser libres y alcanzar, por su mediación la verdadera Vida.

JUAN FRANCISCO GUILLÉN PASTOR

Volver al inicio de la página


POESIA - EN HONOR A LA VIRGEN -.

Son muchas las Cofradías y Hermandades españolas, y sobre todo andaluzas, que han elegido para su virgen titular la advocación dolorosa de Rosario. Algunas de ellas tienen antigüedad de siglos, como Montesión en Sevilla o la de "Los Afligidos" en Puerto de Santa María. Esto lleva consigo que hayan sido muchos los escritores que han dedicado sus versos y poemas a esta advocación publicándolos en diversos libros y revistas: Fray Ricardo de Córdoba, Rafael Zambrana, A.R. Buzón, José Mena.

Hemos seleccionado quince de ellos, uno por cada misterio del Rosario, y son los que, en honor a María Santísima del Rosario Misterios Dolorosos, reproducimos ahora aquí.

DEL ROSARIO ERES LA FLOR
MÁS PURA, LIMPIA Y SENCILLA
LA QUE MITIGA EL DOLOR
DEL QUE, ANTE TI, SE ARRODILLA
COMO HUMILDE PECADOR.

ES TU ROSARIO CAMINO
QUE VA DE CARTAGENA AL CIELO
Y, TAN SUBLIME DESTINO
ES MI VIDA CONSUELO
QUE ESPERABA EL PERDÓN DIVINO.

SE PRENDE MI ALMA DE TI,
ROSARIO DE FILIGRANA,
PENITA, MIEL Y JARDÍN,
CLAVEL EN LABIOS DE GRANA
Y ARRULLOS DE SERAFÍN.

EN CARTAGENA ME QUEDÉ
PARA REZARTE UN ROSARIO,
NO ME PUDE CONTENER,
DEL CORAZÓN A LOS LABIOS,
UN PIROPO TE LANCÉ.

DEL ROSARIO ERES LA ROSA
CANTADA EN LA LETANÍA,
LA ESTRELLA MÁS LUMINOSA,
CAUSA DE NUESTRA ALEGRÍA,
MADRE Y SOBERANA HERMOSA.

ROSARIO, CLAVEL
DE LA PASIÓN DOLOROSA,
SI TU ALMA LLORA HIEL
¿CÓMO TUS MANOS PRECIOSAS
TIENEN DULZURAS DE MIEL?

PARA CONSOLAR TUS MALES,
REINA Y MADRE SOBERANA,
CON ACORDES MUSICALES
ROSARIOS DE FILIGRANA
REPICAN EN TUS VARALES.

EN ESTA NOCHE INFINITA
NI SE DUERMEN LOS LUCEROS ...,
PORQUE ÁNGELES COFRADIEROS
SACAN CON GRACIA EXQUISITA
¡A MI ROSARIO DEL CIELO!

MIRADLA POR DONDE VIENE
EN SU TRONO RELICARIO
TAN BLANCA COMO LA NIEVE
NUESTRA VIRGEN DEL ROSARIO.

LA PENA QUE TE ATORMENTA
NO TIENE PAZ NI CONSUELO
¡QUÉ TRISTE Y QUE SOLA VIENE
NUESTRA ROSARIO DEL CIELO!

ERES POR DICHA Y VENTURA,
VIRGEN Y MADRE DE DIOS:
Y ERES TAN BLANCA Y TAN PURA
QUE HASTA LOS RAYOS DEL SOL
SE ASOMBRAN DE TU HERMOSURA.

ROSARIO, BELLA FLOR
ROTA DE TANTOS DOLORES
QUE SU LLANTO EN RESPLANDOR
HACE QUE TODAS LAS FLORES
LLOREN TAMBIÉN SU DOLOR.

NO HAY PENA COMO TU PENA
DOLOR COMO TU DOLOR
NI CORAZÓN TAN SUFRIDO
QUE TU TRISTE CORAZÓN.

MISTERIOS Y MÁS MISTERIOS
DE UN ROSARIO INTERMINABLE;
DOLORES Y MÁS DOLORES
EN TU CORAZÓN DE MADRE.

BELLA FLOR DE LA HERMOSURA,
AZUCENA INMACULADA,
NARDO Y JAZMÍN DE TERNURA
ROSARIO, MADRE AMADA
Y TALLO DE LA BLANCURA.

Volver al inicio de la página

Volver a la página anterior