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ROSARIUM.
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ROSARIUM.
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En las postreras horas del Viernes de Dolores, cuando ya prácticamente toda Cartagena ha pasado por el templo de la Caridad, los californios salimos a la calle con nuestra primera procesión de Semana Santa, en homenaje y reverencia a los Siete Dolores de Nuestra Patrona, deseando que no se acabe el día más grande de Cartagena, intentando prolongarlo mediante la sublimación del amor con el Cristo de la Misericordia y la mitigación del dolor con la Virgen del Rosario.
Virgen del Rosario que completa la trilogía de las Vírgenes Californias entrando en la Semana Santa de Cartagena bajo palio, como antiguamente hacían la suya pública y solemnisimamente en las ciudades, los reyes, el papa y otros prelados.
Si nuestra Virgen del Primer Dolor es la Madre de la Cofradía, si nuestra Virgen de la Esperanza es el asidero de la Salvación de las Almas, nuestra Virgen del Rosario, por ser el rosario la devoción más perfecta conque podemos honrar a la Virgen y pedir su protección y auxilio, es el nuevo estímulo en el sendero mariano de la Hermandad con las miras puestas en la nueva evangelización.
Elevada por los aires y mecida con amor filial la Virgen del Rosario se vuelve hacia la Caridad entre vivas y requiebros, entre rezos y jaculatorias, haciendo patentes sus misterios dolorosos, para acabar envueltas, ambas, en el delirio de la Salve Popular Cartagenera.
Voces y aplausos, llantos y plegarias, casi impiden continuar su camino quebrando por unos instantes el orden californio mientras se inflaman los pechos y se elevan los corazones de los cartageneros.
Es como una fantasía donde se hace pública manifestación de Fe, en la que los Misterios del Rosario evocan a la antiquísima Oración de las Tres Horas de la dieciochesca Congregación de Servitas, establecida en el mismo Hospital de la Caridad.
La devoción del Rosario esta ahí, sencillamente de la mano de la Cofradía California, en la puerta de la Caridad, queriendo solemnizar más, si cabe, a la gloriosa Virgen María, del linaje de Abraham, nacida de la Tribu de Judá, de la clara estirpe de David.
CARLOS FERRANDIZ ARAUJO
Hermano Mayor
¡¡Música y a la calle!!, esa frase tan escuchada a lo largo de los años es la que muchos cartageneros esperan oír para transformar en cofrades acérrimos que defienden con ahínco a sus agrupaciones, pero la realidad es que durante el resto del año ¿qué hacemos por la comunidad cristiana donde estamos integrados?
Una agrupación tiene que tener algo mas que esperar a que llegue el Miércoles de Ceniza y con la señal de la cruz en la frente ir al Ayuntamiento a escuchar como nuestro Alcalde recita la tan deseada frase. No solo debemos estar dispuestos a sacar la procesión a la calle, aunque este sea nuestro fin principal, hemos de tener siempre presente en nuestra vida, que pertenecemos a una comunidad cristiana y como tal debemos seguir las enseñanzas de nuestro Maestro JESUS.
Comenzó la Pascua con la SANTA CENA acompañado de los doce apóstoles dándonos una lección de humildad y de entrega, entre los olivos con su ORACION EN EL HUERTO de Getsemaní, acompañado por SAN JUAN, SAN PEDRO y SANTIAGO que entre otros le acompañaban. Allí fue donde el traidor lo señaló con un OSCULO ya que lo había vendido por treinta monedas de plata. Los soldados esperaban su PRENDIMIENTO, para conducirlo a su FLAGELACION, y fue nombrado Rey de los Judíos por la CORONACION DE ESPINAS, tuvo un JUICIO y fue su SENTENCIA, ser crucificado. Por su MISERICORDIA infinita, sufrió y cargó con nuestras culpas. Junto a Él en el Gólgota, estaba acompañándole su Madre la SANTISIMA VIRGEN DEL PRIMER DOLOR.
No debemos dejar caer en saco roto todos los sentimientos que afloran en nuestros corazones durante la Semana Grande de Cartagena y con la ayuda de Nuestra Madre MARIA SANTISIMA DEL ROSARIO, evitando que Él, en nuestros hermanos y hermanas sea flagelado, coronado y crucificado.
Que la Madre del Rosario nos aliente en esta, nuestra tarea como cristianos.
FRANCISCO LEAL QUINTAN
Mayordomo Presidente de la Agrupación
La actual Junta Directiva de la Agrupación Virgen del Rosario en Sus Misterios Dolorosos de la que me honro pertenecer como Hermano de Honor ha procurado en los breves años que lleva en funciones, organizar aquellos aspectos de la Agrupación que se han considerado imprescindibles para el mejor desarrollo y andadura de la misma.
Partió de cero, en cuanto a su capital económico pero poco a poco sus dinámicos componentes se lanzaron a trabajar plenamente dentro de la entrañable Cofradía California.
Es digno de resaltar como van adquiriendo cierta solera dentro de dicha cofradía; ahí tenemos sus actos: Magnífica procesión Viernes de Dolores, Triduo a su Venerada Imagen, Rosario de la Aurora, rezo del Santo Rosario los primeros jueves de cada mes, colaboración con Cáritas de la Parroquia de Santa María, publicación de la revista "Palio y Cera" y un largo etcétera de actividades cofradieras. Y es que vivir la Semana Santa de Cartagena es sentirla, amarla y trabajarla con la fuerza expresiva que sale de la potencia del alma, de la fe y de la cristiandad.
El Cartagenero; aunque apático, es espiritual, siente muy adentro que cuando la Cuaresma llega, el corazón se le cuartea con serenidad seráfica, para que Jesucristo y su Dolorosísima Madre no sientan una "Cartagena lejana y sola", sino que arropada por miles de creyentes que con Ellos hacen el pesado y doloroso recorrido del Calvario, no pase desapercibido en aquellos que aún tienen que expiar un pecado para ser perdonados. Estar inmersos en Agrupación o Cofradía, es sentirse vivo durante todo el año.
Laborar por engrandecer esa pasión que se representa en las calles, supone alisar los surcos que unen la tierra con el cielo, donde cada cual hace pasión diaria para alcanzar una gloria eterna, ya que a todas horas se siente uno aliado del Todopoderoso que al final será el que tienda su mano limpia, para aquellos que estemos manchados por pecados.
Él será el que nos tribute el perdón eterno. Ella la que nos llenará con su amor.
Las imágenes que Cartagena saca a la calle inundando eclosiones de esperanza, es un fervoroso espíritu cristiano que ama una tradición verdadera proclamando un órgano expresivo, fructificando acorde con un esfuerzo colectivo de unos días, haciendo Estación muy cerca de Dios, y más cerca de Cristo, para de alguna forma ser en principio un Cirineo, morir en Cruz como un Dimas o un Gestas, ya que a la postre seremos unos evangelistas, que cada trescientos sesenta y cinco días volveremos a nacer espiritualmente y durante el año proclamaremos ese Evangelio que nos enseñó terrenalmente, siendo a veces portadores de la fe, pero no de hechos.
Los que ungidos por Dios
somos seguidores de túnica
y cirio, nos sentimos así.
Ser cofrade es un deseo
de luz para el corazón.
Su cera ardiente es el
resplandor del silencio.
Cubrir el rostro.
Dos lucernarios de visión.
La túnica de amplio vuelo,
es el querer ser solemne ante Dios.
La penitencia no es una imposición.
Esgrimes una fe.
Quisiera que estas líneas a modo de presentación de esta querida revista de "Palio y Cera" sirvan para vivir y sentir mas espiritualmente nuestra Semana Santa. Y quiero terminar con una Saeta que brindo a la Virgen del Rosario y que dice así:
"Para consolar tus males,
Reina y Madre Soberana,
Con acordes musicales
Rosarios de filigrana
repican en tus varales
ANTONIO NAVARRO ZAMORA
A mis emprendedores hermano, ANTONIO NAVARRO y GABRIEL LORENZO, y ANTONIO IBERNON ideador del Hermanamiento con la Policía Naval del Tercio de Levante.
Cuando el trono de MARIA SANTÍSIMA DEL ROSARIO, desfila bajando la entrañable rampa, es un imparable sentimiento de amor lo que lo mueve, unificado en la bellísima faz de la REINA, nuestra MADRE.
Ese sentimiento paseando en su camino penitencial, vino a cruzarse con Cartageneros; uno de ellos, Antonio Ibernón que por entonces tenía su destino en la policía naval de Cartagena; este relacionó un antiguo hermanamiento y la relación de la Virgen del Rosario como patrona de la Marina. Tras su ocurrencia, con entusiasmo emprendimos la labor de Hermanamiento, la acogida fue fantástica desde entonces acompañan todos los Viernes de Dolores el Capitán y una escolta de cinco hombres que prestan servicio a esta unidad.
Pero no sentía contenta si no llegaba más lejos y miembros del cuerpo quisieron darlo todo convirtiéndose en Enamorados de su patrona. Se hicieron sus portapasos, llevándola en su corazón allá donde se encuentren y no olvidando a sus hermanos de agrupación.
A los muchachos que cada año les toca como soldados de la policía naval ser la escolta de María Santísima del Rosario, encontrándose fuera de casa, en su tradición ajena a ellos, un aplauso de admiración y un abrazo de hermano.
Y a los enamorados de Cartagena y de nuestra Virgen, me uno a ellos en un...
¡VIVA LA VIRGEN GUAPA!
No sé si se han percatado creo que sí; se ha restaurado la capilla del Pilar, capilla donde reside habitualmente nuestra Virgencica, nuestra VIRGEN DEL ROSARIO. Hacía falta una buena mano de pintura entre otras cosas. Se hacia necesario dignificar el lugar donde se le venera a lo largo de 365 o 366 días según sea bisiesto, ya que lugar más digno que donde se encuentra es imposible encontrar, pero sí quería hacer notar con esta frase el estado en que se encontraba la Capilla.
Hecha esta aclaración pertinente y totalmente necesaria, quisiera resaltar la labor por un determinado grupo de hermanos, que independientemente del costo que ha supuesto el acometer parte de la obra realizada por profesionales y gastos de materiales necesarios para su realización, como decía, estos hermanos de una forma desprendida y generosa no han escatimado esfuerzos y horas para que de alguna manera totalmente generosa, echasen algunas (muchísimas) horas de su descanso personal y de su relación familiar.
A título personal y si se me permite,
quisiera desde estas líneas hacer un par de observaciones.
La primera es felicitar al mencionado grupo de personas que han colaborado desinteresadamente
en esta labor tan importante como necesaria y animarles aunque creo que no hace
falta para que mantengan vivo ese espíritu de colaboración y solidaridad
que viene demostrando a través del tiempo en nuestra queridísima
Agrupación.
Por último hacer notar que a mí personalmente, cada vez que puedo me acerco a visitar a mi ROSARIO y que como es lógico, que después de tanto esfuerzo y algún que otro sacrificio, me encuentre con las luces de la CAPILLA apagadas y con las flores que le suelen poner, por los suelos en vez de en su jarrón; no sé a quien corresponde ésta creo que insignificante labor, que es la de dar a un interruptor y, acercar unas flores a un jarrón. Pero creo que si el mencionado esfuerzo se realizara nos daríamos por contentos tanto yo personalmente como algunas otras personas que se sienten decepcionadas y algo acomplejadas de ver que esto no sucede en el resto de las Capillas y que con un poco de entusiasmo creo que tampoco sucedería en la nuestra.
Y por último mi agradecimiento a la persona o personas que han logrado con su gestión o intercesión, se autorizase el arreglo de la capilla donde se venera a la Virgen del PILAR y a la VIRGEN DEL ROSARIO.
GABRIEL LORENZO GALLEGO
A LA VIRGEN DEL ROSARIO
QUE POR CARTAGENA BAILA
EL DÍA, DE LA PATRONA DE NUESTRA CIUDAD
¡LA VIRGEN DE LA CARIDAD!
NOSOTROS TUS PORTAPASOS
TE OFRECEMOS EN ESTE DÍA
PENA, DOLOR; Y ALEGRÍA
VIRGEN MÍA DEL ROSARIO.
DE NUEVO LLEGÓ EL DÍA,
DE NUEVO OTRO AÑO ASOMAS
POR LA IGLESIA "SANTA MARÍA"
PARA LLENAR CARTAGENA
DE: ¡VIVAS!, LLANTOS Y ALEGRÍAS.
ES DE NOCHE EN LA CIUDAD,
TU TRONO, SOBRE PORTAPASOS,
HECHA DE NUEVO A ANDAR.
Y MUY CERCA DE ESE LUGAR
TE ESPERA EN SU GRAN DÍA,
LA PATRONA DE NUESTRA CIUDAD,
¡LA VIRGEN DE LA CARIDAD!.
ENTRE TANTO, TUS PORTAPASOS
POR LA CALLE GRITANDO VAN:
¡VIVA LA VIRGEN DEL ROSARIO!
¡MIRADLA QUE GUAPA VA!.
ENTRE PALMAS Y EMOCIONES
LOS CARTAGENEROS LA VEN BAILAR
EN ESE TRONO QUE LLEVAN
LOS PORTAPASOS DEL LUGAR.
ES LA VIRGEN DEL ROSARIO
¡QUE BLANCA Y HERMOSA VA!
Y DELANTE A POCOS METROS
Y ABRIÉNDOLE LA CIUDAD
UN CRISTO PRECIOSO VA.
MI ALEGRÍA SE DESBORDA
CUANDO AL PASAR POR LA SERRETA
Y LLEGAR A LA CARIDAD
EN MANO TE LEVANTAMOS
VIRGEN MÍA DEL ROSARIO
PARA QUE VEAS PRECIOSA Y GUAPA
A LA VIRGEN DE LA CARIDAD.
Y EL SILENCIO NOS INVADE
PARA EMPEZAR A CANTAR:
LA "GRAN SALVE MARINERA ",
CON EL TRONO SOBRE EL HOMBRO
Y SIN PARAR DE BAILAR.
EL MOMENTO MAS DESEADO
¡HA LLEGADO!,
MIS TRES AMORES MAS PRECIADOS
EN EL MISMO LUGAR SE HAN ENCONTRADO.
ANTE TODO MI PATRONA
LA REINA DE ESTA CIUDAD
¡VIVA! LA VIRGEN DE LA CARIDAD.
LA SEGUNDA: LA QUE PÓRTO
ESA VIRGENCICA QUE BAJO PALIO VA
ES LA VIRGEN DEL ROSARIO
Y A LA QUE GRITO: ¡QUE GUAPA VAS!.
A LA TERCERA:
Y QUE DE OTRA FORMA, MÁS QUIERO
UNA LIGERA MENCIÓN
PUES SE ENCARGÓ DE MI CONCEPCIÓN.
Y TRAS EL CORTO PASEO
POR NUESTRA CIUDAD
VIRGEN MÍA DEL ROSARIO
LLEGA DE NUEVO EL FINAL.
Y EN LA RECOGIDA DE LA IGLESIA,
TE OCULTAS Y TE VUELVES A ASOMAR
TRAS LA SALVE Y EL HIMNO NACIONAL.
SON TUS PORTAPASOS
QUE DESFALLECIDOS VAN
Y NO QUIEREN VERTE ENTRAR.
Y UNA VEZ TERMINADA
LA "BONITA PROCESIÓN";
TUS PENITENTES TE SUPLICAN:
QUE "AVIVES" SU CORAZÓN,
HASTA LA PRÓXIMA PROCESIÓN
(VICTORIO 1.996)